2134 (D 12/12/2021) Sabotajes, inmigrantes y restos griegos

La actividad que define mejor a los partidos reaccionarios es la del sabotaje: “cuanto peor, mejor”. Los republicanos de USA, los autoproclamados halcones del déficit público, nos informa Paul Krugman, eran unos farsantes a los que en realidad nunca les preocupó la deuda pública —una opinión que quedó verificada por el silencio de los susodichos cuando el Gobierno de Trump disparó el déficit— y que lo que querían era ver sufrir la economía durante el mandato de Obama. Su actitud en la política es el reflejo de un cálculo frío y cínico. Los votantes suelen culpar al partido que ocupa el Gobierno de todo lo malo que ocurre mientras está al timón, lo cual proporciona un incentivo para que una formación política lo suficientemente despiadada se dedique al sabotaje descarado. Y cómo no, los republicanos que se opusieron a todos los esfuerzos por contener el coronavirus atacan ahora al Gobierno por no haber sido capaz de acabar con la pandemia. Los políticos republicanos se comportan como funcionarios de un partido en un régimen autoritario, que compiten por adoptar las posturas más extremistas como una manera de demostrar su lealtad a la causa y al líder.

       La consecuencia es que una de nuestras dos principales formaciones políticas no sólo se está negando a ayudar al país a hacer frente a sus problemas, sino que está contribuyendo activamente a hacerlo ingobernable.

    Espero que los demás no hayamos perdido la capacidad de horrorizarnos como corresponde ante este degradante espectáculo.

          (¿Se refiere Krugman a EE.UU.? ¿Seguro?)

La Fobia y paranoia contra los inmigrantes...

...llega a extremos como éste: Frontex, Agencia Europa de la Guardia de Fronteras y Costas, con sede en Varsovia, encargada por la Unión Europea del control fronterizo del espacio Schengen, reconoce públicamente que, aunque no está directamente involucrada en las acciones represivas contra los inmigrantes ilegales, ya que estas tareas corresponden a los gobiernos nacionales, sin embargo se hace cómplice de ellos al apoyarlos en estas políticas.

    Y así, Soledad Gallego Díaz nos informa que “con sus drones y aviones de vigilancia, Frontex detecta embarcaciones repletas de migrantes y avisa a las lanchas de la Guardia Costera de Libia para que capturen a esas personas antes de que alguna embarcación humanitaria pueda acercárseles". “Capturar” es la palabra exacta porque no se trata de rescatarlas sino de apresarlas, llevarlas a territorio libio y meterlas en unas cárceles secretas por tiempo indefinido. En una de ellas, conocida como El Edificio, hay 1.500 personas sometidas a palizas, abusos, detención ilegal, chantaje, malnutrición y trabajos esclavos.”

      En el primer semestre del año 2021 Frontex ha “devuelto” el doble de inmigrantes que en las misma fechas del año 2020. 

Restos griegos. Δ, O/ω

La variante Ómicron ha seguido a la Delta. Lo que le sugiere lo siguiente a Alex Grijelmo.

   Los estudios de lengua griega han ido cayendo penosamente en las escuelas y colegios. Pero su vitalidad le hace emerger de manera subrepticia, y a veces descarada, en áreas tales como la botánica, la medicina, las tecnologías…, y hasta en los nombres de borrascas o incluso de virus y sus variantes como es el caso de la covid19: su actual variante, ómicron, que ha seguido a la delta, es un ejemplo de ello. O-micron, en griego, es “o” pequeña, contra la O-mega, que es la “o” grande.

      El griego se utiliza incluso para dar realce y lustre a empresas y actividades de todo tipo, tales como Delta Airline, relojes Omega, el Lancia Delta, los coches Alfa Romeo, Sigma Dos, cámaras Sigma, máquinas de coser Sigma y Alfa, los rayos Gamma, machos Alfa…

       Con las variantes de la Covid veremos qué nombre de letra se les ocurrirá cuando lleguemos a la “V” de “vacuna”.