lunes, 2 de marzo de 2015

1062 (L 02/03/15) Que no, Javier, que no, que no podemos estar peor

Y mira que lo admiro. Y lo respeto. Aunque no le conozco fuera de sus lecturas. Pero esta vez pinchó y bien, mi amigo Cercas.

      Pues no que va y suelta la andanada de que los que dicen (decimos) que no se puede estar peor, que “peor, imposible”, somos unos…, qué? esperad que voy a citarlo textualmente, somos unos, eso, falsos, deshonestos, frívolos y reaccionarios. Pues se ha despachado bien, se habrá quedado a gusto. Y argumenta diciendo que peor están en la Africa hambruna o nosotros bajo la dictadura, toma ya, y se queda tan tranquilo. Yo también puedo añadir que peor estaríamos todos encerrados en Guantánamo, o en un potro de tortura. Como si pudiera compararse la época nacional-sindicalista con la actual, en democracia (al menos cacareada), cuyo contexto político permite calificar de peor las mentiras del gobierno actual que la crueldades coherentes con la bestialidad de las dictaduras. Al fin y al cabo aquéllas eran previsibles y respondían ante dios y ante la historia.

      Para rematar su exabrupto, Javier Cercas nos cuenta una historia de su abuela, de nombre Francisca por más señas, que un día le dijo: “Hijo mío, de lo malo a lo bueno se pasa muy bien, pero de lo bueno a lo malo hay que ver qué mal se pasa” (sic). Hay que ver lo sabia que era su abuela. Si parece Rajoy soltando evidencias en sus escasas ruedas de prensa.

      Y añade: “estamos metidos en un agujero, pero si no sabemos exactamente de qué agujero se trata y cuándo y cómo se cavó, nunca saldremos de él”. Esta duda impide que podamos contestarle pues es de tal calibre que por más que intentáramos aclarárselo mucho me temo que no serviría de mucho. Por si le ayuda, le puedo recetar que lea este blog, a lo largo de los tres últimos años, o la prensa diaria, o el wikipedia con temas tales como “burbuja inmobiliaria”, rescate de bancos, corrupción a mansalva, retórica política, promesas incumplidas, etc.etc, etc.

     A nadie se le escapa que cuando aseguramos que cualquier cambio que venga no podrá ser a peor, a no ser que estos mismos siguieran, lo que queremos decir es que venga quien venga no será peor que éstos. Y que estos no se queden ni un minuto más del día siguiente a las elecciones generales. Y los que vengan, cualesquiera que sean, cuanto más nuevos e inocentes sean, tanto mejor pues traerán menos lastre.


     Pero Javier, perdona que te tutee (todos tenemos derecho a cometer de vez en cuando alguna estupidez), de verdad que hacía falta decir esto?

No hay comentarios:

Publicar un comentario