1. Los políticos que sobran
Los palurdos y los corruptos. O sea, todos.
El que no es lerdo, porque será corrupto. Y el que no parezca corrompido, por
palurdo. Sobran, pues, todos los políticos. Como dice Elvira Lindo, “hay un
vicio en España que hace imposible cualquier debate: defender a los tuyos aun
cuando sepas que no tienen razón.” Como niños mal educados, como torpes, como
cerriles, el que pierde un combate retórico, o se queda sin argumentos para
defender lo expuesto, acude al “tú, más” o, peor aún, al insulto y
descalificación del adversario, llegando a gritarles “fachas! nazis” o “comunistas”,
como aquél que cerraba sus debates llamando a sus adversarios “científicos!”,
lo cual hace imposible continuar el diálogo. (A ver si me aplico el cuento.)
Ya sabemos el descuento que se les va a
aplicar a los bienes inmuebles transferidos a la SAREB (Sociedad de gestión de
Activos procedentes de la REestructuración Bancaria, o sea, el banco malo): el
63%. Eso significa que la nueva sociedad inmobiliaria recibe el encargo de
gestionar activos tóxicos por un tercio de su valor, lo que implica que los
bancos “sangrados” tendrán de golpe un hueco del 63% de sus activos que habrán
de rellenar con una recapitalización que está por ver cómo y quién la financia.
Está previsto que SAREB emita deuda, avalada por el Estado, por 55.000 millones €.
Desaparecen activos falsos de los balances de los bancos (o Cajas), pero a costa de un hachazo a sus
cuentas de resultados. Echo de menos cifras que desglosen el % de activos
pertenecientes a Bancos y el % de Cajas. La previsible bajada de precios en el
mercado inmobiliario, como impacto de la inundación que supone esta nueva
oferta, y que las constructoras eficientes habrán de soportar, no dejará de ser
un castigo por el trabajo bien hecho. A veces estas cosas pasan.
Los palurdos y los corruptos. O sea, todos.
El que no es lerdo, porque será corrupto. Y el que no parezca corrompido, por
palurdo. Sobran, pues, todos los políticos. Como dice Elvira Lindo, “hay un
vicio en España que hace imposible cualquier debate: defender a los tuyos aun
cuando sepas que no tienen razón.” Como niños mal educados, como torpes, como
cerriles, el que pierde un combate retórico, o se queda sin argumentos para
defender lo expuesto, acude al “tú, más” o, peor aún, al insulto y
descalificación del adversario, llegando a gritarles “fachas! nazis” o “comunistas”,
como aquél que cerraba sus debates llamando a sus adversarios “científicos!”,
lo cual hace imposible continuar el diálogo. (A ver si me aplico el cuento.)
Sobran todos los políticos. Los palurdos y los corruptos. Todos. Porque
el mal es sistémico, y porque pertenecen a una generación de sumisos al aparato
del partido que los ha vuelto a todos, por definición, corruptos y
descerebrados. De qué sirve que algunos hayan podido ser honrados si no han
sabido o podido desprenderse de los delincuentes? Quizás por ser demasiados. O
porque las redes de intereses personales son tan intrincadas que ya no sabe
nadie dónde están ubicados.
Y
no me digan que no hay que ser lerdos para despedir a miles de empleados con el
objetivo, dicen, de crear empleo! de reducir ingresos a los trabajadores para
incentivar el consumo! de no parar de decir que hacen todo lo que hacen en el interés
general de todos los españoles (eso debería darse por supuesto), cuando al
tanto proclamarlo evidencian lo contrario, y en realidad buscan sólo su
beneficio personal.
2. Los evasores fiscales y los políticos,
sus cómplices
Para ayudar a Grecia a encontrar recursos con
los que ajustar sus desequilibrios financieros, y en vista de las presiones de
Bruselas y Berlín, la entonces Ministra de Economía francesa Christine Lagarde, hoy
directora del FMI, entregó al gobierno griego en 2010 una lista de cuentas
bancarias en Suiza de evasores fiscales con 2.059 nombres entre los que
figuraban importantes empresarios y cargos públicos griegos. Esa lista duerme
el sueño de los justos en un cajón desde entonces, habiéndose negado el
gobierno griego a informar de su contenido en una comisión parlamentaria que
les interrogó sobre el tema. El periodista Kostas Vaxevanis ha publicado esa
lista y no tardó ni 24 horas en ser detenido por revelación de secretos de
interés nacional, o algo por el estilo (hoy ya en libertad). Los evasores siguen con su dinero sin que
nadie los persiga ni castigue (imaginen la extorsión que podrían hacer si
tiraran de la manta) mientras los políticos hacen la vista gorda y los oídos
sordos sobre su responsabilidad. ¿Hay o no hay connivencia entre delincuentes
fiscales y sus cómplices políticos en activo? ¿Cabe esperar absolutamente nada
de la delincuente clase política? ¿Sobran o no sobran esta generación entera de
políticos? Hay que desmantelarla de raíz, recordando sus nombres en una “lista”
cuyo encabezado debería titularse: delenda
est memoria (que se borre su memoria) y que debería ser quemada en una
fiesta anual a la entrada de los Parlamentos nacionales.
3. Banco malo, caca
Ya sabemos el descuento que se les va a
aplicar a los bienes inmuebles transferidos a la SAREB (Sociedad de gestión de
Activos procedentes de la REestructuración Bancaria, o sea, el banco malo): el
63%. Eso significa que la nueva sociedad inmobiliaria recibe el encargo de
gestionar activos tóxicos por un tercio de su valor, lo que implica que los
bancos “sangrados” tendrán de golpe un hueco del 63% de sus activos que habrán
de rellenar con una recapitalización que está por ver cómo y quién la financia.
Está previsto que SAREB emita deuda, avalada por el Estado, por 55.000 millones €.
Desaparecen activos falsos de los balances de los bancos (o Cajas), pero a costa de un hachazo a sus
cuentas de resultados. Echo de menos cifras que desglosen el % de activos
pertenecientes a Bancos y el % de Cajas. La previsible bajada de precios en el
mercado inmobiliario, como impacto de la inundación que supone esta nueva
oferta, y que las constructoras eficientes habrán de soportar, no dejará de ser
un castigo por el trabajo bien hecho. A veces estas cosas pasan.
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