1. El Supremo deja en pelotas a magistrados de la Audiencia


2. Chiste de Forges, Mérkules en su soledad
Que cada palo aguante su vela. Pues vale. Islandia procesando a los banqueros, la pobre Grecia hipnotizada por los Merkozy dando palos de ciego que reciben en la boca los parados. España pidiendo la vez para entrar en el baño. La Merkel dirigiendo el cotarro sin saberse muy bien el pentagrama. El Reino Unido mirando por el ojo de la cerradura. Y monsieur Sarkozy empinándose de puntillas para no perder el protagonismo que le roba Alemania, para lo cual se niega a aceptar un Tribunal de Cuentas supranacional o se inventa nuevos términos gaullistas del tipo de "refundar Europa" u otros por el estilo, cerrando sus discursos con La Marsellesa. El intento de una democracia se hace patente por la mesa redonda, pero de nada sirve si todos están desnortados y miran al revés. Mucho hablar de Europa (instituciones de la UE) por encima de los gobiernos nacionales, y resulta que son los gobiernos nacionales los que sacan pecho por encima de las instituciones de la UE.
3. Los monstruos que perturban nuestra estructura...
...económica no son los déficits presupuestarios ni los mercados financieros, como nos quieren hacer creer, sino que son estos tres, según Joan Herrera: el financiero, el inmobiliario y el energético, o sea, la deuda privada, las inversiones en infraestructuras sin rentabilidad y la dependencia energética. En relación a la primera, que es un 220% del PIB contra el 66% del PIB de la deuda pública, a la costumbre secular de financiarse con el crédito de proveedores a 90/180 días se añaden ahora los activos tóxicos por créditos hipotecarios y de inmobiliarias quebradas cuyos morosos habrá que sepultar en un banco sarcófago ad hoc; en cuanto a las inversiones no productivas, aparte de las obras faraónicas y opera per se que hemos calificado ya en otro lugar (vide entrada 101.3 del 11 de octubre), son muchas las inversiones en autopistas, o ferroviarias, o aeropuertos sin aviones, cuyas pérdidas encima son cubiertas mediante financiación pública; y en cuanto al tercero, nuestra dependencia energética de fuente extranjera es el doble que la de Francia, carecemos de uranio y bailamos al son de las subidas y bajas de los carburantes, además de tener una política en este sector que se centra más en las empresas energéticas que en las necesidades del país. Por qué son estos tres puntos la clave de nuestra debilidad estructural económica es algo que no se nos alcanza todavía, pero tan pronto como lo entendamos volveremos sobre el particular.
No hay comentarios:
Publicar un comentario