Por fin
leo en la prensa algo correcto sobre el machismo en el Neolítico. Tras su boda
con Penélope, Odiseo conminó a su esposa a salir de su domicilio familiar de
Esparta para acompañarle a la suya propia en Ítaca. Penélope en la puerta de su
casa según el mito dudó, pero terminó accediendo al requerimiento de su esposo
y marchó con él. Con ello dio pie a la patrilocalidad. Y con ella se iniciaba
el patriarcado (año 3000 adne., acumulación de excedentes alimentarios, desigualdad social, adornos
metálicos, patrimonio familiar, herencia, apellido paternal, substitución del avunculado -tío materno- por el patriarcado…). Lo que acaban de
descubrir ahora los arqueólogos ya lo desveló el que suscribe hace 12 años en el Anuario de
la UNED 2009, vol.2 págs. 111 y ss.
A la distribución de la renta Joaquín Estefanía añade otros factores que cimientan la desigualdad económico-social, a saber, la educación y la fiscalidad.
Decepcionados con los políticos y con las instituciones, los ciudadanos se han echado a la calle. Y es en la calle donde se hará que la sociedad progrese. Sirvan de ejemplo los movimientos feministas, LGTBI, pensionistas..., que conseguirán satisfacer sus exigencias en las calles a pesar de las resistencias en el sistema y en los Parlamentos.
La provocadora, el soso y el acelerado es el título del artículo del 11 de abril de Fernando Vallespin. Recomendado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario