XIV. reflexiones y disparates del día (14/07/11)

     1. Mercado secundario

     El Banco Central Europeo ha decidido entrar en el mercado secundario de la deuda. Eso quiere decir que, además de subscribir bonos u otras obligaciones cuando se emitan, también comprará estos documentos que ya estén en manos de tenedores actuales. Bravo! parece buena idea la de que los inversores timoratos consigan vencer la desconfianza  al saber  que,  en caso necesario,  siempre podrían acudir a las  autoridades monetarias europeas para que los rescaten.  Como sigan utilizando la cabeza  estos

ocaso? o aurora?

bienpensantes acabarán sacándonos de la crisis. Y si no, al tiempo. Recuerdan el origen del desastre de la crisis financiera en USA? lo del re-endoso (mercado secundario) de los títulos hipotecarios en fondos de inversión ad hoc..., bravo! pues para que vean, que el mercado secundario, como el cuchillo, no es bueno ni malo, todo depende del uso que se haga de ellos.
     2. Mercado, caca

     El Roto dice que si te fijas demasiado en los números luego ves borrosa a la gente. Y Forges denuncia que "el problema de Europa es que los políticos nomaclarócratas y los andestamosoyes no se ponen de acuerdo, y así los mercados nos forcian con tolmorrismo". Con una salvedad: que ninguna enfermedad se cura machacando a martillazos los termómetros (ni matando al mensajero...) y que tachar a los "mercados" de monstruos perversos no nos ayuda a identificar, perseguir y castigar las prácticas fraudulentas que los delincuentes de la ingeniería financiera puedan realizar en los mercados (que, al ser neutros, no tienen la culpa de nada. No demos palos de ciego. Me remito a la moraleja anterior sobre los mercados secundarios.)

     3. Crisis mediática

     Sabido es es que las buenas noticias no venden. O sea que al lector lo que le interesa de verdad son las desgracias ajenas (digo yo, pero sólo lo deduzco como conclusión de lo anterior). Y como ya sabemos que el "fin" (la audiencia de público, la tirada de ejemplares) justifica (de hecho) los "medios" (mentiras, escándalos y lo que haga falta), el resultado es una realidad mediática que no coincide con la realidad real, no sé si me explico. Y lo peor es que ya no sabemos cuál es más real, si la real o la mediática. Digo esto para preguntarme: cuánto de mediático y cuánto de real hay en la crisis actual? (La pregunta se refiere a la diagnosis y tratamiento, porque el síntoma resultante es evidente, ahí está el paro.) Qué afecta más al mercado de la deuda, la evaluación de las CRA o la forma en que los medios la publican?...