Los gobiernos están perdiendo el monopolio del poder frente a un
puñado de multinacionales.
En su artículo Los
siete magníficos de la tecnología contra los Estados Eva Borrueguero nos alerta
del peligro en que nos ponen estos gigantes de la tecnología: Alphabet, Amazon,
Apple, Meta, Microsoft, Nvidia y Tesla. La capitalización en bolsa de las 10
primeras compañías tecnológicas es de 17,4 billones $, cifra que supera la suma
del PIB de Alemania, Japón, India y Francia juntas. Sólo Apple tiene un valor
de mercado de 3,4 billones de $, equivalente al PIB del Reino Unido.
Su influencia
llega hasta el puchero de la cocina, por no citar el apoyo declarado en las
redes de Musk a Donald Trump en las elecciones de diputados y senadores en USA.
Otra injerencia más en cuestiones de Estado y de seguridad nacional: en la guerra
de Ukrania el magnate de la red social X interceptó el ataque de drones
ucranios contra buques de guerra rusos, apagando la red de comunicaciones
Starlink. Y no hablemos de su injerencia en el campo cognitivo y emocional, y
ahora más, con la Inteligencia Artificial.
Las big tech
están siendo tratadas como Estados soberanos al recibir embajadores digitales para
agilizar sus relaciones, Dinamarca la primera en el 2017. E irrumpen directamente
en materias de seguridad internacional organizando el Foro Mundial de Internet
contra el Terrorismo en el que participan Facebook, Twitter/X y YouTube. Es difícil
imaginar el trabajo legal de los lobbies sin la ayuda de las nuevas
tecnologías, lo que les dará más fuerza aún en su impunidad fiscal y en su
influencia en las leyes que puedan afectarles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario