2186 (D 24/4/2022) Rematando el asunto de las mascarillas

Rematando mi opinión de las mascarillas como símbolo de opresión y de intimidación para someter al ciudadano-súbdito, que queda así abducido por una paranoia colectiva en la que todos los otros son hostiles, cito a Sergio del Molino que reflexiona como sigue sobre las mascarillas: parece que “recuperar la condición de adulto asusta más que la exposición a un contagio…”, y algunos que tenían ganas de quitársela ya de una vez quizás no atrevan a celebrarlo “intimidados por los que seguirán llevándolas o por quienes casi parece que desean una nueva ola para darse el gusto de tener razón”.

O Najat el Hachmi, premio Planeta 2021 y columnista del El País, que se desahoga confesando que “hoy lo único que quiero es tirarlas a la basura o quemarlas en la hoguera para exorcizar estos dos últimos años… de un aislamiento casi tan perjudicial como la enfermedad… Hoy por fin, desvelando las sonrisas, al mirarnos nos sentiremos más seguros…” etc. etc. etc. 

Las redes "sociales" nos acercan a los distantes pero nos separan de los cercanos. Como las mascarillas.

Mascarillas fuera !

Y a propósito del despropósito de los tapabocas, dice Millás que las autoridades negaron al principio la eficacia de las mascarillas, quizá porque no había bastantes, y las hicieron luego obligatorias incluso para el exterior, quizá porque había demasiadas.