¿Podríais sospechar que los distintos horarios fueron unificados gracias al ferrocarril? Hacía falta saber a qué hora salía y a qué hora llegaba el tren, dice J.M.Mulet. Y no digamos ya más tarde con el avión.
Podrías saber lo que tardabas si viajabas con un reloj, pero tendrías que conocer de antemano los horarios vigentes en cada uno de los posibles destinos si querías organizar tus tareas razonablemente.
Hoy resulta fácil planificar tus tiempos mediante los husos horarios. Tomando como referencia el meridiano de Greenwich, que en España pasa por Denia, en 1912 en París se establecieron 24 husos horarios en cada 15 grados de longitud. 24 horas, 15 grados, 60 minutos, 360º… (todavía compramos los huevos por docenas), estamos usando el sistema sexagesimal sumerio de hace 4 milenios. La hora de Greenwich GMT sirvió de partida. En USA tienen tres husos horarios, y en China, aunque ocupa un territorio de tres husos también, se impone un solo horario para todo el país. En España la unificación de horarios se aplicó el primer día de enero de 1901, con la excepción de Canarias desde 1922.
El sol (como todos los astros) no avanza por el cielo hacia el Oeste: somos nosotros los que rodamos hacia el Este. Cuando viajamos hacia el oeste, si lo hacemos a la misma “velocidad” del sol (unos 1.200 kms/h.) la hora de llegada será la misma que la de salida.
Bolis vivos
Podría detallar las vicisitudes por las
que he pasado y los sitios más inverosímiles en los que lo he buscado pero voy
a ahorraros la molestia contándoos la solución, falsa pero eficaz, que he
ingeniado: he puesto el boli que me quedaba frente a un espejo.