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producidos, escritos, dirigidos, protagonizados, como todos los suyos, por
Michael Moore. De nuevo su falta de rigor, sus alardes, sus sobreactuaciones,
degradan un trabajo que, por ser bien intencionado, denunciante de injusticias,
justiciero, y coincidir sus propósitos con los míos, es por lo que le concedo
esta ventana para que pueda expresarse. Aunque tras ensalzar la revolución tunecina
democrática y femenina, no añada luego que abortó por las fuerzas musulmanas reaccionarias;
y aunque tras elogiar las glorias alemanas, se olvide de los contratos laborales
precarios o de la misoginia de la cultura germánica.
Michael Moore |
En un pretendido intento de aprender e
importar valores culturales europeos a la cultura norteamericana, comienza
recordando que desde la Guerra Mundial
USA no ha hecho más que declarar la guerra a diestro y siniestro fracasando en
todos sus intentos: Corea, Vietnam, Afganistán, Irak… Y ahora, qué invadimos ahora?
Su recorrido por nuestro continente
incluye:
Italia, dando ejemplo de cómo una
sociedad del bienestar puede priorizar valores humanos sobre los puramente
mercantiles;
Francia, que tiene mucho que enseñar
sobre cocina;
Finlandia es todo un ejemplo de cómo una
educación sin “deberes” (home-works)
ni exámenes ni horarios agobiantes, se ha demostrado como el paradigma del mejor
sistema de la enseñanza pública eficaz e igualitaria;
Eslovenia con sus universidades gratuitas
se ha convertido en un refugio para estudiantes norteamericanos sin recursos
para costearse los estudios en una Universidad norteamericana;
Alemania
es un ejemplo de cómo sólo asumiendo sus errores y su memoria histórica puede
recuperar su autoestima en el concurso de las naciones;
Portugal ha demostrado que “legalizar”
la droga es el mejor medio para acabar con ella;
Noruega ha priorizado sobre la venganza la justicia, sobre el castigo a los delincuentes su reintegración, y eso lo hacen en chalets
individuales donde recomponen su identidad social;
Túnez es el primer anuncio musulmán sobre el
papel de la mujer en la nueva democracia;
Vigdís Finnbogadóttir |
... pero es Islandia, con la huelga femenina en 1975
tras la cual encarceló a numerosos delincuentes banqueros y con Vigdís Finnbogadóttir como la primera mujer Presidente del Gobierno en 1980, la que marca el comienzo de un nuevo mundo con la participación de una nueva mujer en la sociedad y en las instituciones. "Tres es el número mínimo de mujeres necesarias para co-decidir en Consejos y Corporaciones, porque 1 es simbólico y 2 son minoría". "La crisis económica es efecto de un exceso de testosterona y de prisa en el enriquecimiento en nuestra sociedad" patriarcal.
El muro de Berlín le sirve a Michael
Moore de moraleja sobre cómo bastan un martillo y un cincel para derribar lo
que parecía una barrera inexpugnable. Y con un egocentrismo digno de todo aquél
que se precie de ser un buen americano, recuerda que los grandes avances
democráticos, feministas, raciales, etc., según él tuvieron un origen norteamericano
aunque luego se apliquen en todos los países menos en USA.
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