XXIV. reflexiones y otros disparates del día (24/07/11)

     1. Llega el 15/M.

       Miles de “Indignados” llegan a Madrid, Atocha y Sol, desde los cuatro puntos cardinales de nuestra península. Los tres lemas más repetidos (vide “Lemas” más arriba en este blog) son el rechazo a Europa, a los bancos y a los políticos. Los dos primeros no los comparto, pues las críticas mal argumentadas refuerzan y galvanizan lo criticado. Europa sigue siendo un sueño y una necesidad. Los bancos como sistema e instituciones nos ha costado mucho desarrollarlas y tirarlas ahora por la borda es un retroceso en toda regla que no nos podemos permitir. Los problemas puntuales que planteen tratémoslos como tales. Cuando arremetemos contra ellos lo que realmente rechazamos es el enriquecimiento y mangoneo desvergonzado de sus ejecutivos, e-je-cu-ti-vos, no del sistema como tal que lo necesitamos y que funcionará como debe si se le regula y se grava a los magnates, quiero decir mangantes, con impuestos progresivos de hasta un 80% o más a partir de cierto importe. En cuanto al tercer tema, el sistema político, ahí sí que nos encontramos. Y no para intervenirlos en temas puntuales sino para negarlos totalmente, como sistema, obsoleto por falta de participación democrática de los ciudadanos. Pero el tema merece reflexión y lo dejo mejor para mañana.

      2. Temas de la semana

drago

      La coincidencia al milímetro entre los temas comentados en estos “disparates” y los elegidos ayer sábado por el programa de TVE “Informe Semanal”, a saber: la dimisión de Camps, el caso Murdoch, el códice calixtino, la deuda griega… (aparte de la masacre en Noruega que era noticia del día), me hizo pensar por un momento, sólo por un momento, que en TVE seleccionan los temas siguiendo la lectura de este blog… Y me hizo gracia, qué quiere que les diga. Claro que cualquiera, sin ser periodista, dada la relevancia de las noticias, cualquiera habría hecho la misma selección.
     3. Ritual de iniciación de adolescentes (scouts)
     Acudo al ritual de la “Promesa” mediante el cual, veladas las armas la noche anterior, en el campamento de verano de Veruela del Moncayo, un adolescente de la patrulla “gavilanes blancos” recibe el espaldarazo que le hace pasar de “lobato” a “tropa” (los alevines son “castores”, los monitores “escoltas” y los adultos con mando en plaza “escauters”). Luego se les bautiza mediante embadurnamiento con restos de comida rebozados de lodo y tomate que parecen zurullos, en consonancia con el medio natural en que realizan sus actividades. La emoción que les embarga no está exenta, claro es, de nerviosismo, aunque la hazaña y las pruebas no alcancen la dureza del joven espartano que, en sus pruebas de iniciación como adulto, se dejó devorar las entrañas por una zorra escondida debajo de su saya, antes que delatarse soltándola. Las pruebas son las mismas para los scouts (léase “escaos”) de ambos sexos (o géneros), aunque hoy se trata de tres que son todos varones. Todo tan agradable, naif, sano, compartido… y de pronto interfieren unos rezos cristianos que no entiendo a cuanto de qué vienen. Y es que ésta es la otra metástasis de la que hablábamos el 10 de julio (vide X.1), la que impide a esta sociedad ser laica de una vez, aunque lo abrupto de la inoportunidad me sorprendiera hasta el punto de que aún no me atreva a evaluarlo.