sábado, 13 de octubre de 2012

473. reflexiones y otros disparates del día (13/10/12)


      3 días en el agujero negro (II de III)

           Son 3 los días que el ritual establece como de permanencia para los que son abducidos en los agujero negros.
Por qué 3? Porque 3 son muchos. Hay tres números, el singular, el dual y el plural. (Los que hayan seguido este blog desde el principio podrán quejarse de que me esté repitiendo). El singular es el 1, el dual es la pareja y el plural es el muchos. En efecto, tres en francés es “mucho, muy”; troppo en italiano es “muchos, demasiados”; tropa o tribu en castellano implica un conjunto de varios, muchos, o al menos más de dos. El 3 no llegaría a ser el 3 actual hasta tanto comenzáramos a aprender a numerar, lo cual iniciamos con el 4.
Tres era el número de la diosa. Por qué? Porque eran muchas, tantas como necesitáramos, tantas como lugares hubiera para darle culto, lo que forzó al patriarcado al actual monoteísmo, al ser sus valores justo los opuestos a los anteriormente vigentes. Y así tres eran la Gracias, tres las Musas (las 9 posteriores no eran sino tres veces tres), tres las Grises, tres las Erinias (Parcas en Roma), tres las Horas…, etc.
Qué es lo sagrado? Lo que tiene que ver con la muerte. Lo sagrado es, pues, impuro, dañino, algo que sólo debe ser tratado por personadas sacralizadas, iniciadas al efecto. Y como las diosas eran sagradas, eran las diosas de la Vida y de la Muerte, pues ya sabemos que para nuestros ancestros eran lo mismo. O dicho de otro modo, como las diosas lo eran de la Muerte y de la Vida, por eso mismo eran sagradas.
Y así llegamos a donde queríamos llegar: que para nuestros abuelos el 3 era el número de la Diosa, el número de la Muerte. Por eso Heracles cuando busca a su efebo Hilas a quien imagina muerto, grita tres veces: Hilas! Hilas! Hilas! Por eso Xto regresa del mundo de los muertos al tercer día. Por eso yo espero regenerarme al cabo de los tres días.
           Y así llegamos al epílogo: que este descanso sea de 3 días se debe a que los gases de los políticos me han arrojado –y aherrojado- en este agujero negro. Mortal, por supuesto. Si no, no serían tres los días que debo permanecer en él. Vale?
 







Esperaaadmeeeee…!

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