1. De Guindos, chamarilero
Cambio compra de bonos por 60.000
millones de rescate en lugar de los 100.000, marchando una de eurobonos en el
mercado secundario, señores del Banco Central Europeo que no tengo todo el día,
como se lo piensen tanto se van a perder el chollo de la semana, no les voy a
pedir ni 100, ni 90, ni 80, ni 70.000 millones, sólo 60, si me compran bonos,
sólo sesentaaaa…, a ver tú chaval, quítate de en medio, que no me dejas ver,
quién quiere bonos? usted, usted, usted…, no lo ven? sres del Banco Central, si
es que me los quitan de las manos, qué hace que no los emiten! pero ya, que es
para hoy!... cambio compra de bonos por 60.000 millones de rescate, no por 100,
ni por 90, ni por 80, ni por 70…, sólo por 60.000 millones, no se pierdan esta
oportunidad, no tienten a la suerte, esta mañana una señora de buen porte vino
a verme, quería comprar…
Dónde está la bola? aquí? aquí? nooo…! Aaquí!
ay, ay, ay… Fíjense bien en el truco: Bruselas nos da los 60.000 (se lo tenemos
que pedir nosotros, para nosotros, antes) y luego ni los olemos, rebotan aquí,
pin! y se van a las cajas de los bancos alemanes, quieren que les enseñemos el
truco? ah! por cierto y que no se nos olvide darles las gracias, a todos, a
Bruselas y a los alemanes, por listos. Eso es el rescate, una farsa, ni más ni
menos, una puñetera farsa. Y mire lo que le digo, sr. de Guindos, mientras los
alemanes no le vean las orejas al lobo (nuestra salida del euro, si quiere
usted de farol, pero bien representada, que se lo crean, podríamos incluso liderar la zona del euro latino) no cejarán en su
empeño de seguir es-tru-ján-do-nos. Que son como ustedes, los de este gobierno,
que nos dan por saco sólo por el disfrute del ejercicio del poder. (Aparte de
llenarse los bolsillos, y evitar que sus Borja jrs. se mezclen con la chusma en
urgencias y en el colegio y todo eso…)
Cambio compra de bonos por 60.000
millones de rescate en lugar de los 100.000, marchando una de eurobonos en el mercado
secundario, oído cocina! señores del Banco Central Europeo que no tengo todo el día…
2. De nuevo las ideologías
Josep
Ramoneda piensa que los líderes políticos que han ganado las últimas elecciones
lo han hecho todos con una fuerte carga de ideología, exagerando incluso los
rasgos de su corriente, sean de derechas o izquierdas. Y cita a González,
Aznar, Zapatero, el mismo Rajoy, Sarkozy, Obama… Pocas políticas han estado tan
cargadas de ideología (neloliberal, reaccionaria…) y al mismo tan declarada
como ausente de toda ideología, como la actual de este gobierno de Rajoy. Es,
pues, fácil y conveniente discernir bien esos rasgos para utilizarlos cuando se
convoca a los ciudadanos para que les voten. Y así, “la derecha desacredita lo
público, da por supuesto que es inviable el Estado del Bienestar, promueve la desregulación de los mercados y recupera la moral de raíz religiosa y, sabedora
de que son las ideologías las que ganan las elecciones, proclama (falazmente)
su decadencia como modo de desahuciar a la izquierda que se ha quedado sin
proyecto”. Luego intenta asociar la naturaleza efímera de lo digital a la
consolidación de la comunidad, momento y terreno en el que Ramoneda se pierde. Pero se
recupera cuando resalta que la brevedad de los mensajes por las redes fuerza la
radicalización (caricatura?) de las ideas, lo que induce a una confrontación de
amigo/enemigo. Lo mejor es el final: los autores intelectuales de la ideología
del PP actual son Wert y Gallardón que, al aliar lo religioso con el
nacionalismo, nos hace recordar el nacional-catolicismo de los tiempos
franquistas.
3. "Super Mario" y BE. v. BCE
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| ban-co ma-lo, ca-ca |
Mario Draghi fue recibido como Presidente del BCE
(Banco Central Europeo) en olor de multitud, quizás simplemente porque
significaba la retirada del nefasto Trichet. No ha necesitado mucho tiempo para
mostrarse como lo que es, un calzonazos. Le ha contradicho tanto y tantas veces
su “subordinado” Wiedmann, el capo del Bundesbank, que si no se impone ni
dimite caerá en el ridículo más espantoso. Promete a Monti y Rajoy el oro y el
moro (compra de deudas española e italiana sin límite, financiación directa a
los bancos…) y al día siguiente el alemán lo desmiente, lo calla, y lo sienta
de un plumazo. Si Draghi quiere mantener el mínimo de credibilidad (y
honestidad y dignidad) que le queda, debería imponerse o, si no, dimitir
inmediatamente de su puesto de Presidente de un BCE que está subordinado
indecentemente al Bundesbank.
Si el
Banco de España cedió su soberanía a al BCE, lo hizo porque así convenía a los
intereses de España y de la UE. Pero si los alemanes anteponen sus propios
intereses obstruyendo la tarea del BCE, el BE (junto con la UE) mejor estarían
si los Bancos centrales nacionales recuperaran sus funciones (entre ellas la
emisión de moneda, aunque fuera en pesetas, y la inyección de liquidez a los
bancos que así podrían adquirir a bajo precio Deuda pública), todo antes que
dejar que esta parálisis nos deje catalépticos del todo.
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