1. UPyD exige el rechazo de Bildu
“El portavoz de UPyD en el País
Vasco, Gorka Maneiro, pedirá a la Fiscalía General del Estado que intervenga y
paralice la posible designación de Iñaki Goioaga como senador autonómico por EH
Bildu, por considerar que su nombramiento es una indecencia, un agravio más
contra las víctimas del terrorismo y un insulto a la sociedad democrática”,
reza la noticia. ETA merecía toda la repulsa cuando actuaba como banda
terrorista. Pero en su versión política, pacífica, cívica, que era la que
deseábamos, si ahora son así debemos congratularnos. Por cierto que el sr.
Goioaga, abogado, compareció ante la Audiencia Nacional donde fue procesado y
resultó absuelto. En cuanto al aspecto democrático, es UPyD la que parece hacer
gala de su carencia, pues Bildu representa a los electores que los eligieron
democráticamente y es de acuerdo con las reglas democráticas que van a nombrar
a su representante en el Senado. A mí esto de UPyD que me lo expliquen.
2. Juegos de palabras
Viene el tema a colación de
preguntas que me han hecho sobre la oportunidad o conveniencia de hacer juegos
de palabras como el que se coló en la entrada 551.3 “Del dicho al hecho” del
31/12/12.
En el principio fue el Verbo, pero cuál
fue antes, el logos concepto? o el logos palabra? Estamos todos de acuerdo en
que ambos se retroalimentan pero eso no contesta la pregunta. Tenemos nuestra
idea al respecto (para elaborar juicios tuvimos necesidad de palabras previas)
pero ahora no viene al caso discutirla. El tema que queremos tratar es la
existencia autóctona de las palabras una vez emitidas por nosotros. Tienen
tanta fuerza que cuando se encuentran por el aire (y no digamos ya en las
páginas de un libro) se hacen guiños, juguetean, coquetean con vida propia y
sabe dios cómo y dónde acabarían si no fuera porque siempre, o casi siempre,
terminan explotando en el aire en juegos de artificio, como fuegos
artificiales.
3. Tres experiencias pilotos, el futuro
ya está aquí
Si queremos conocer a dónde nos
llevará este Gobierno no hace falta preguntárselo a una bola de cristal. Ya
sabemos lo que ha hecho en tres experiencias pilotos, en las CC.AA. de
Madrid, de Valencia y de Galicia. En las tres se han aplicado una política
delictiva en la gestión de las instituciones financieras, una privatización de
los servicios públicos y una abducción de los medios de comunicación, con un
derroche incontrolado en la gestión del gasto corriente. Véanse, si no, las
cuentas del Ayuntamiento de Madrid o las ayudas que van a darse a los casinos
de Madrid, si antes alguien no lo remedia.
La debacle de las instituciones financieras se centra
en la Caixa de Madrid, la CAM de Valencia y la Novogalicia. La de Madrid,
redenominada Bankia, por sus activos tóxicos; la CAM de Valencia por
“financiar” obras tan disparatadas como el aeropuerto de Castellón o los
proyectos inconclusos del eximio arquitecto Calatrava, con domicilio fiscal en
Suiza; la de Galicia por la estafa de los bonos preferentes que han dejado a
miles de familias sin todos su ahorros. Y en los tres territorios un saqueo de
las arcas de las Cajas por decenas de directivos y asesores afines al partido,
caso Gürtel para la financiación ilegal del partido, agujeros multimillonarios
mientras los directivos y consejeros se blindaban compensaciones y pensiones
millonarias, y comisiones por aquí comisiones por allá, la la la la. Ahora se
trata de buscar culpables fuera de las Cajas, echándole la culpa al Banco de
España por no haberlas castigado a tiempo! o excusándose con la disciplina de
Bruselas y Alemania o la crisssis internacional y las especulaciones
financieras de los inversores extranjeros.
La privatización de los servicios públicos viene impuesta por la
teología económica de la FAES y comienza por una difamación pública de los
gestores públicos acompañada de un recorte de gastos de los propios servicios que
deteriora lógicamente su prestación, para después “externalizarlos”, como paso
previo a su privatización, que más adelante dará paso a una atención elitista,
o su rescate de nuevo con fondos públicos cuando los gestores privados hayan
dejado los hospitales escaldados con ingentes pérdidas tras haberse embolsado
millonarios beneficios. Y esto no es especulación ni elucubraciones delirantes,
estamos hablando de casos concretos ya conocidos: Alzira, Denia… Para que la
atención sanitaria sea transparente es indispensable una gestión pública del
dinero público.
Los medios de comunicación secuestrados, TeleMadrid, Canal 3 de
Valencia o la misma tve, perdieron audiencia en picado al substituir a los
profesionales del medio por secuaces políticos que dejaron sin vida sus
programas y reportajes mientras loaban sin pudor a los gobiernos respectivos.
Una vez quebradas estas televisiones se inicia el proceso de su venta a
gestores privados afines al partido.
Y así podríamos continuar con otros
temas y sectores. Pero como muestra, bastan. Allí por donde pasan, no vuelve a
crecer la hierba. Ya sabemos lo que hacen. Y lo que nos espera.
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