1973 (X 23/10/19) El embrollo de kurdos, turcos y sirios en tierra de nadie

Los que seguís este blog habréis podido notar que los kurdos me caen bien.
     Los kurdos son un pueblo indoeuropeo(*) que habita en la región montañosa del Kurdistán, en Asia Occidental, que incluye el sudeste de Turquía y norte de Siria, así como el norte de Irak y noroeste de Irán, más un pequeño enclave en Armenia. Es la minoría étnica más grande en el Oriente Próximo y el mayor pueblo del mundo sin Estado. De sus cerca de 60 millones de personas 45 % de ellos vive en Turquía, un 25 % en Irán, otro 25 % en Irak y un 5 % en Siria. Hay también una importante diáspora kurda en Europa Occidental, sobre todo en países como Alemania, Reino Unido y Suecia.

    Cuando el grupo terrorista ISIS (Estado Islámico) intentó constituirse como Califato sin territorio al norte de Siria e Irak, los kurdos combatieron contra ellos bajo los auspicios de EE.UU. Esta actuación les enfrentó con el propio gobierno sirio de Bashar-al-Asad que, con la ayuda de los rusos, no dudó en bombardearlos, a pesar de que estaban liberando parte de su territorio. Al decidir EE.UU. abandonar la región, ésta queda bajo la tutela rusa lo que deja a los kurdos sin protección alguna. Y por si fuera poco, el hecho de que la zona kurda tenga fuertes reservas de petróleo puede perjudicarles como especial centro de atención.

     La situación actual se complica al ser atacados por Turquía que teme que los kurdos puedan conseguir un reconocimiento internacional como Estado independiente. Así que a los kurdos les llueven los palos -y bombas- desde hace 8 años por todos los lados.

El Kurdistán sirio, Rojava, tras la derrota del ISIS, ocupa unos 50.000 km2, casi un tercio del territorio de Siria, en el que habitan más de 2 millones de personas. Se gestiona con una Administración autónoma que tiene fuerzas armadas propias, con mujeres(+), así como una Constitución que modela un Estado definido a menudo como socialista-libertario, con igualdad entre géneros, justicia retributiva, libertad de cultos, protección de minorías étnicas y todo un conjunto de rasgos que incluso han sido definidos como de una auténtica revolución social, lo cual les ha permitido ganar la simpatía de los partidos de izquierda progresistas de Europa Occidental.

      Para Jerusalén, el Kurdistán en su conjunto tiene un especial interés estratégico: de ahí sale parte del petróleo que consume. Si se formara un Estado kurdo para Israel sería un excelente aliado situado entre Siria, Irak, Irán y Turquía.

       Por si fuera poco, Turquía y Bruselas están enredados en un conflicto complejo que incluye los refugiados en la frontera con Siria (tres millones), el gas de esa región que puede liberar Europa de la dependencia con Rusia, el tema de la reunificación de Chipre y la eventual asociación de Turquía con la UE. Lo que le hace escribir a Franciso Veiga un artículo Reajustes a la turca: “Posiblemente, el trasfondo de la aparatosa ofensiva turca en Siria resida en una compleja negociación a cara de perro entre Ankara y Bruselas en la cual las piezas de intercambio sean refugiados, cuotas del negocio del gas en el Mediterráneo oriental, desbloqueo de las negociaciones sobre la reunificación de Chipre, nueva posición de Atenas ante Bruselas —tras las elecciones del pasado mes de julio— y nuevos acuerdos estructurales con la Unión Europea.”
P/S.: Ayer Putin y Erdogan acordaron en el balneario de Sochi "adjudicar" a Turquía la franja del norte de Siria y dieron a los kurdos seis días para retirarse de la zona.

__________________________

(*) Hay asentamientos urbanos que se remontan a tiempos prehistóricos, especialmente Piranshahr1​ 2​ con 8000 años y Erbil3​ con 6000.

(+)    https://images.app.goo.gl/i3Df2Kz8YNTLSEFLA